Noches de Concierto Y Desconcierto

- Ya han pasado las Navidades. Por fin, alegría y alborozo, hasta el año que viene. Este año las he pasado con el estómago revuelto. Prometo operarme los nervios para los próximos festejos.

- Anoche, concierto glorioso de los Not Quite Dead. Yo estaba de cuerpo presente, pero esta vez de espíritu ausente -menos en lo que concierne al tema musical en sí, ya que me gustó mucho el concierto-.

- Cada vez estoy más convencia de los lustros que separan mi mente de la mente de los demás.***.Y yo mientras tanto ojiplática. Bueno, todo lo ojiplática que se puede estar con un ojo medio cerrado por culpa del humo de los bares.

- Lo que me lleva todo esto a reflexionar sobre el hecho de que no me siento bien, cómoda,en grupos amplios de gente -soy más de petit comité-. Esto de sacar temas de conversación como cartas de baraja no es lo mío. Y porque siempre acabo repitiendo las mismas anécdotas sobre Nabo, que harto esta ya el pobre. Y porque me he hecho mayor. ***. Y ahora, pásenme el papel para limpiar el culo, que me he quedado medianamente agusto.

- Además me costó reconocer a todo el que me daba palmadas en la espalda. Y el otro 50% de gente no me recordaba, lo que me lleva a pensar que cada vez me estoy volviendo más invisible.

- Y también llegué a la conclusión de que el Canelo tiene hordas de fans. Por la derecha, izquierda y centro me decían lo bueno que es Canelo.Lo que me llevó en un momento determinado del concierto a darme la vuelta y decir en voz en grito que es tan bueno con la guitarra como en casa -quería haber dicho en la cama, pero no me pareció el momento con tanta groupie suelta...-

- Por lo demás yo sigo feliz con mi vida. Descubriendo que tengo el poder de autocegarme en los días de nieve. Los copos que se cruzan en mi camino acaban todos directamente en mis pestañas, mientras mi cadera lucha por no quebrarse con el suelo escurridizo. Estoy a un paso de conseguir coreografías dignas de un Mickael Jackson geriátrico.

-Ismael Serrano: ...De un tiempo a esta parte, a mi amor propio algo le falta, lo has dejado unos puntos por debajo del de Kafka....
Y la vida me parece una fiesta a la que nadie se ha molestado en invitarme.
De un tiempo a esta parte me cuesta tanto, tanto, tanto, me cuesta tanto no amarte...

- Edito...por si acaso...